Cualquier persona que tenga una tienda online o un comercio electrónico (ecommerce) tiene el objetivo de vender sus productos al mayor número posible de consumidores. Para eso hay que llegar hasta los clientes.
Si la tienda tiene página, es preciso posicionarla lo más arriba que se pueda en los motores de búsqueda como Google. Y es que, hay poca vida más allá de la primera página de resultados de los buscadores. Pero no es momento de hablar sobre SEO y el posicionamiento web, algo con lo que se pueden llenar páginas y páginas. Es el momento de hablar de una estrategia que lleva años utilizándose en el mundo del mercadeo: el email marketing.
El email marketing está más vigente que nunca
Esta estrategia se ha revelado como una de las más importantes a la hora de llegar a los clientes, estrechar relaciones con ellos y conseguir que estos compren o contraten los productos y servicios que puedan ofrecer las diferentes empresas.
La importancia del email marketing es cada vez mayor, y más, teniendo en cuenta el coste que suponen las campañas y el retorno de la inversión (ROI) que tienen –122%-. Es por eso mismo que el sector no para de reinventarse. Los softwares para hacer más sencilla y eficiente la ejecución de campañas, como la nueva versión Mailrelay, no paran renovarse y adaptarse a las nuevas exigencias del email marketing.
El correo electrónico es un canal perfecto para lanzar comunicaciones comerciales. El email ha ido ganando peso a medida que el alcance de internet se ha ido expandiendo en el mundo. Cada vez son más las personas sobre la faz de la Tierra que tienen correo electrónico. De hecho, se espera que para el año 2020 la cifra de usuarios supere los 3.000 millones de personas. Y gran parte de la culpa de ese incremento es de los dispositivos móviles, especialmente de los teléfonos inteligentes, que han facilitado una enormidad la tarea de consultar la bandeja de entrada del correo.
Ya no es necesario consultar un ordenador para poder leer los correos recibidos. Casi todos los usuarios tienen vinculadas sus cuentas de correo electrónico al teléfono, por lo que pueden ver al instante los mensajes recibidos y enviar otros. Esta rapidez a la hora de poder consultar la bandeja de entrada ha supuesto un avance para las campañas de marketing, puesto que las comunicaciones difícilmente se leen con retraso. En el caso de enviar una promoción con una fecha límite, pocas personas leerán el correo una vez pasada la fecha a la que hacía referencia la comunicación.
Además, los propios correos incluyen ya dos elementos primordiales para el mercadeo. El primero de ellos es la llamada a la acción (CTA), un enlace que permite que el suscriptor o cliente realice las acciones que se había planteado el emisor del correo. El segundo son los botones de las redes sociales. Gracias a esos botones, los usuarios pueden compartir, con un solo clic, todo aquel contenido que consideren relevante. De esta forma, una campaña puede llegarle a una persona que no aparecía en la base de datos de la empresa emisora, provocando un impacto mucho mayor de cada comunicación.